El cuidado de nuestra voz, el uso de mascarillas y la limpieza constante de todo nuestro entorno son conceptos que no deberían ir unidos. Pero, por desgracia, la situación sanitaria que tenemos en la actualidad, nos obliga a hacerlo de esta manera.
Muchas personas usan su voz como herramienta de trabajo. Algunos de estos profesionales pueden ser maestros, profesores, telefonistas, comerciales, profesionales que imparten cursos o formadores, cantantes, locutores de radio, narradores, comentaristas, guías, ponentes y un largo etcétera.

Factores que afectan a la salud de nuestra voz
Alguna vez os habéis preguntado ¿por qué al final del día noto la voz más ronca, irritación, tos…? En ello pueden influir muchos factores como son el uso de mascarilla, la falta de hábitos saludables y de higiene vocal o el uso constante de productos de limpieza.
La función de fonación o el habla se lleva a cabo gracias a que una serie de estructuras se movilizan de forma adecuada. Estas estructuras se encuentran en la laringe, faringe y en la boca. Además, debemos tener en cuenta que los pulmones también están implicados en el habla cuando expulsan el aire hacia el exterior.
Cuando las estructuras que permiten la fonación no se encuentran en buen estado o hacemos un mal uso de ellas, la función se ve afectada y la consecuencia más directa es lo que conocemos coloquialmente como “afonía”. Me gustaría aclarar que este término es incorrecto ya que, afonía, describe la pérdida absoluta de la voz. El término adecuado sería “disfonía”, siendo afonía el mayor grado de disfonía.
Desde marzo de 2020, nos encontramos en una situación excepcional y nos vemos obligados, entre otras cosas, a llevar mascarillas para salir a la calle y/o en nuestro puesto de trabajo. Algunas personas debemos llevar la mascarilla todo el día puesta y eso no nos ayuda en absoluto a cuidar nuestra voz. Gritamos para que nos oigan, respiramos el dióxido que expulsa nuestro cuerpo en el intercambio respiratorio y más aspectos que día tras día experimentamos.

Tampoco nos ayuda el uso constante de productos higienizantes de superficies y materiales. En el lugar de trabajo y cuando entramos en casa se ha convertido en un ritual diario el uso de estos productos que permiten desinfectar todo lo que ha estado en la calle o haya tocado otra persona. Limpiamos las zapatillas, las bolsas de la compra, fregamos el suelo, nos ponemos gel hidroalcohólico en las manos, etc. Pero no nos hemos parado a pensar que el uso de estos productos de forma tan continua puede ser perjudicial para nuestro organismo.
¿Cómo nos afectan el uso de los higienizantes?
Me gustaría hacer hincapié en un aspecto importante para entender lo que os voy a comentar. Que podamos oler los productos o sustancias desde que abrimos el envase y lo usamos tiene más significado del que parece.
El hecho de oler significa que la sustancia se ha evaporado (volatilizado) y ha llegado al interior de nuestra nariz. Pero, el aire no se queda solamente en esta zona. De la misma manera que al expulsar el aire de los pulmones pasa por la laringe (cuerdas vocales) y llega hasta la boca, cuando respiramos un producto, entra por la nariz, pasa por la faringe, por la laringe y llega hasta los pulmones.
Lo que significa que esas partículas diminutas, que llegan a nuestra nariz para permitirnos olerlas, pueden pasar al resto de estructuras de nuestro cuerpo e incluso pueden quedarse pegadas a lo largo de su recorrido.
Cómo cuidar nuestra voz de los productos higienizantes
Todavía no conocemos las posibles consecuencias del uso constante de estos productos durante tantos meses consecutivos, pero no estaría mal, tener en cuenta medidas para prevenir posibles efectos negativos y cuidar nuestra voz. Quizá habréis notado la aparición o aumento de algunos signos como irritación de garganta, tos irritativa, aumento de reacciones alérgicas como la rinitis, reacciones repentinas en la piel, etc., lo que puede resultar una consecuencia directa del contacto o la inhalación de las partículas que os comentaba en el párrafo anterior.

Por ello, es importante proteger a la población más vulnerable de la inhalación de estos productos y, sobre todo, protegernos a nosotros mismos. ¿Qué podemos hacer para cuidar nuestra voz si usamos productos higienizantes?
- Airear las diferentes zonas que hayamos desinfectado.
- Usar todos los productos que podamos al aire libre.
- Beber agua de forma continuada.
- Protegernos las vías respiratorias con mascarilla cuando nos expongamos a ellos.
Todas estas son algunas de las medidas preventivas ante el irremediable uso de los productos desinfectantes e higienizantes que en estos tiempos nos toca vivir.
7 consejos para cuidar nuestra voz por el uso de la mascarilla
A raíz del uso de la mascarilla y de sus inconvenientes, podría ser muy interesante contaros algunos consejos para cuidar nuestra voz y evitar posibles lesiones que podrían ocurrir si no nos concienciamos de su importancia.

- Hidratación frecuente. Siempre llevando una botella de agua cerca para poder mantener la mucosa bien humedecida.
- Hablar con frases cortas. Evitando siempre quedarnos sin aire mientras hablamos para no forzar.
- Dormir 8 horas al día mínimo. El descanso es fundamental para disminuir la tensión acumulada a lo largo del día.
- Evitar agentes externos como tabaco, consumo de alcohol, cachimbas, vapeadores, etc.
- Si la voz es nuestra herramienta principal de trabajo es recomendable acudir a un profesional cualificado para que te explique algunas técnicas de calentamiento y entrenamiento vocal.
- Mantener un patrón respiratorio nasal. Esto significa que debemos siempre respirar por la nariz ya que esta es la que filtra, humedece y calienta el aire que entra a nuestro cuerpo, la boca no.
- La postura de nuestro cuerpo debe ser relajada, pies a la altura de las caderas, cuello relajado y cabeza mirando al frente. Lo ideal para proyectar la voz sería que nuestra boca forme un ángulo de 90 grados con nuestra columna vertebral.
Estos son algunos consejos que os dejo para cuidar vuestra voz y paliar un poco los efectos del uso de la mascarilla. También es importante mencionar que estos consejos nos van a venir bien siempre, usemos o no mascarilla. Pero, en la actualidad debemos tenerlos más presentes que nunca. Espero que los pongáis en práctica y si tenéis alguna duda, estaré encantada de ayudaros a solucionarla.
Por otra parte, si necesitáis más información acerca de nuestros servicios y tratamientos para adultos y niños, podéis verlos en nuestra página de logopedia.